Pensando en La Push (Jacob)

La playa. Al fin estaba allí. Después de tener rota dos veces la pierna había podido ir a la playa de La Push. Todo allí estaba en calma, incluso parecía que el mar danzaba al son de un vals. Aquel lugar era un mundo a parte de Forks. Forks, un pueblo extremadamente peligroso sólo por no dejar pasar la luz del sol. Y yo no sabía cómo seguir adelante.

Yo quería a Daniel pero... No dejaba de pensar en Alexander, ¿Por qué? Me había roto la pierna dos veces y me había secuestrado tras haber hecho polvo a Dan. Me sentía fatal y, cuando me di cuenta, estaba sentada en mitad de la playa, descalza y perdida en el mar.

estaba haciendo el muerto en el agua cuando me vino el olor de una humana.
me puse de pie y vi que estaba sola
-que haces aquí sola?-le pregunte acercandome

Levanté la mirada y vi a un chico bastante corpulento y muy moreno, me recordaba a Dan.

-Oh, he venido a... Pasar el rato.-respondí. En realidad no estaba segura de a qué había ido allí exactamente.

-a pasar el rato...-dije pensativo. sacudi la cabeza-Soy Jake-extendi una mano mojada

Le estreché la mano levantándome del suelo y esbozando una sonrisa.

-Yo soy Ginny, o Maggie. Cualquiera de los dos vale.

-encantado. ¿te gusta la playa?-le pregunte por hablar de algo

-Igual.-dije y volví a sentarme mientras me secaba la mano.-Me encanta la playa.

En realidad, es el mejor lugar de por aquí.-pensé.

-si, la playa mola mucho-dije sentandome en la arena- y vives por aquí?

Hice un mohín, pensativa.

-Bueno... No exactamente, vivo en las afueras de Forks, mi casa está frente al bosque. Tú eres de los indios de La Push, ¿No? Los Quileutes.

-pues si, veo que estas informada. te contaria alguna historia, pero no puedo-dije, hacia tiempo que habia dejado de decir "leyendas" porque estaba claro que eran reales

-¿No puedes? Ah, ya sé, historias sobre lobos.-dije. Dan me había contado muchas sobre eso, Dan... Suspiré y miré hacia el suelo.

-a quien se le ha ido la lengua esta vez?-dije suspirando, no habia remedio...

Ya la había cagado.

Vale, Ginny, intenta arreglarlo.

-Todo el mundo cuenta leyendas sobre los lobosy los Quileutes.

-no creo, pero supongo que da igual. ¿que te han contado?-le pregunte

-Eh-em... Que descendéis de los lobos.-dije un poco nerviosa.

Y que sois licántropos.-pensé, eso sí que no se lo iba a decir.

la mire, sabia que sabia mas de lo que decia
-algo mas?

-Nada más.-dije, esta vez logré un tono sereno en mi voz.-¿Hay algo más?-pregunté enarcando una ceja.

-alomejor... dime que mas sabes, venga, que se que algo mas te han contado

-He dicho que no sé nada más.-dije mirándolo con el ceño fruncido.

Este tío impresiona, y si estoy sentada más.-pensé.

-bueno, bueno...-deje correr el tema-. ¿desde cuando vives en Forks?

-Unas cuatro semanas.-respondí.

Dios, menos mal que ha dejado el tema, si no habría metido en un lío a Daniel.-pensé mientras respiraba hondo.

-y quien te hablo de La Push?-pregunte por preguntar

-Nadie, yo nací en Forks. Y de vez en cuando venía a ver a mi padre. No es la primera vez que vengo a First Beach.-dije apoyando mis manos atrás.

-ya veo, ya... sabes, una de mis mejores amigas hacia igual que tu, nacio aqui, pero solo venia de vez en cuando a ver a su padre hasta que se quedo a vivir con el

-Vaya... Seguro que no la conozco. Cuando venía sólo estaba con mi padre. Ahora es como si fuera la primera vez que estoy en Forks, no conozco a nadie.

O... A casi... Nadie.