Visitando a mi gorda {Christine}

Tarde soleada en una tarde de primavera, las cosa mas extraña que me habia pasado aquí, bueno en realidad otras cosas mas extrañas me habian pasado.

Suspiré hacia bastante tiempoq ue no veia a Christine, me daba miedo aparecer y echar cara ahora, cuando lo habia echo antes, pero Nick dijo que ella me entendia, aunque sinceramnete no sabía se creerlo del todo. Tras un gran rato pensándolo decidí ir a verla, según me había conatado estaba bastante cambiada y más imvolucrada en el mundo no humano. Era alucinante tener como mejor a miga a una licántropo, pero seguía con el miedo de que hubiese cambiado demasiado que me detestara o algo por el estilo.

Bajé de la motó, estacionandola en esa casa tan conocida para mí. Me acerqué algo temerosa, notaba los latidos de mi corazón rápidos a causa de la emoción tenía ganas de abrazarla y por otra parte tení miedo de que fuera borde o algo así. Llamé al timbre mordiendome el labio.

El abuelo me había pedido que lavase su coche ya que él, al estar ya un poco mayor,se cansaba con facilidad. Aproveché que no tenía guardia y me dirigí a la parte trasera de la casa, donde estaba en garaje , saqué el coche de él y me dispuse a limpiarlo con una esponja y a mi lado, un cubo de agua el cual cambiaba cada cierto tiempo de contenido.
Con mis sentidos súper desarrollados, escuché cómo una moto aparcaba delante de la casa. Escuché también un corazón un tanto acelerado, y sentí un olor extrañamente familiar. Aún no me acostumbraba a eso de los olores.
- ¡Estoy en la parte trasera! - Vociferé.

Alcé las ceja scuando la escuché ¿cómo me habia escuchado?, vale eso era una pregunta tonta.
Me acerqué con unos pasos un tanto seguros, ¿que estaria haciendo ella allí detrás?. La ví y no pude evitar sonreír, y la miré un tanto sorprendida estaba cambiada, bastante cambiada, la veia mas alta y con los rasgos mas amduros, aquella niña había desaparecido.
- ¿Christine? - pregunté con la voz temblorosa a causa de la emoción.

Dejé de limpiar el coche para ver a aquella persona que tanto quería, mi mejor amiga, aquella que siempre estaba ahí para ayudarme, aunque no la había visto cuando me pasó lo de la transformación, no le guardaba rencor ni nada por el estilo. Era mi amiga y estaba aquí, eso era lo que me importaba. Solté la esponja que tenía en la mano y la pasé por mis pantalones cortos para secarla un poco.
-¿Day?- Le sonreí, fui corriendo hacia ella y la abracé por la cintura, levantándola en el aire.
-¡Qué alegría que estés aquí!

Me reí a carcajadas cuando em abrazó, dios menuda fuerza jamás iba a pensar que llegase a tener esa fuerxa. Me reí cuando me elevó - ohhh me haces quedar como una enana, no valee! - dije bromeando, luego la estreché fuerte, hacia mucho tiempo que no le abrazaba. - como has cambiado nenaa!

Solté una carcajada, aún abrazadas, después la solté, depositándola en el suelo.
- Es que eres una enana- Dije bromeando.
Puse cara de fuerte y hice poses con mis brazos, ahora un poco más marcados. - ¿Has visto? Ni una sola gota de grasa en el cuerpo ,soy todo músculos. - Relajé las facciones y sonreí tiernamente.
-Te he echado mucho de menos.

Me reí cuando empezó a hacer los poses, sinceramente estaba muy cambiada, luego le sonreí con total sinceridad cuando dijo que me había echado de menos - y yo, ni te lo imaginas gorda - le dije con dulzura - y espero que me puedas perdonar por no haber estado presente cuand ocurrió aquello - dije con la voz un tanto apagada.

La tristeza volvió a embargarme, pero ahora sabía cómo ocultarla, no quería que Dayana me viese mal,ya no. Ya no volvería a llorar, por lo menos no cuando alguien me viese. Ahora sabía cómo poner una máscara en mi cara,y quitarla sólo para las personas que me interesaba.
- No te preocupes, todo está bien.- Mentí, con una sonrisa en los labios.
- ¿Qué tal te va todo? Veo que ya sabes sobre licántropos- Dije, haciendo una cara graciosa al decir la última palabra.

Le miré poco convencida cuando dijo que todo estaba bien, pero no quise decir nada, quizás no quisiese hablar de ello, y desde mi punto de vista era lo mejor.
Luego le sonreí - y tanto que sé, y sobre vampiros sadicos también - me reí, entonces eché un poco de menos mis tardes con Jacob, suspiré. - como han cambiado las cosas - le dije.

Suspiré- La verdad es que sí, nada es igual ahora, todo es diferente, mírate a mí, a tí...- Me encogí de hombros.
-Entonces sabrás,que lo que estaba con nosotras en el centro comercial hace casi ya un año, era un vampiro, ¿no? - Le pregunté, con una ceja enarcada.
La tomé del brazo y la llevé hasta los escalones de la entrada trasera- Podemos hablar de esos cambios, ¿no te parece?- dije, mientras me sentaba.

Me reí - sí, pero lo supe meses después - dije bromeando, y era cierto cuando me empecé a salir con Jacob me dí cuenta de muchas cosas extrañas que me habian pasado y encontré las respuestas.

Nos dirigimos a los escalones, me senté.
- Bueno tampoco han sido muchos cambios - dije con una mueca - salí con Jacob pero... se acabó - susurré algo triste.- luego llegó mi primo - sonreí ampliamente, recordando cuando le envié a esta misma casa.- ehhh que ya le conoces - le guiñé un ojo divertida.

-Vaya...lo siento- Comenté, mirando el suelo. Levanté la vista cuando mencionó a su primo.
-Sí,Nicholas,es un chico muy simpático. Por cierto gordi, muchas gracias por la camiseta y demás, ahora es mi favorita- Añadí, con una sonrisa.

- No pasa nada - dije sonriendo ampliamente y acrodandome de Thomas. Luego le miré contenta - me alegro que te gustara, enserio! - le abracé - y bua me gustaria que fuesemos familía - le miré picara.

-¡Claro que me encantó! Menos mal que es talla XXL, por que aún estoy creciendo y no sé cuando voy a parar- Dije con una sonrisa,mientras le devolvía el abrazo
Cuando mencionó el tema de que quería que fuésemos familia, hice una mueca con la cara.
-No sé Dayana...no quiero volver a sufrir,y ya he tenido mala experiencia con un licántropo, por lo que intuyo tu primo no tiene imprimación,y puede llegar una chica y ala, ya tienes un milagro. O me podría pasar a mí. Yo creo que lo mejor será que me haga "monja"- Dije, bromeando.
-Además tontita, tú y yo ya somos familia. Tú eres mi hermana pequeña.- Dije antes de estrujarla suavecito entre mis brazos y darle un beso sonoro en la mejilla.

Me reí cuando dijo lo de la camisa - es que como no sabia que talla comparar pos decidí la de gorda! - volví a reirme.
Luego le miré escuchando sus palabras - lo entiendo Chris, quizás seais buenos amigos y punto.... que la amistad también es muy bonita - le sonreí y la señalé a ella ya mí continuamente.

Le miré sonriente - es verdas soy tu hermana pequeña - le dí un leve codazo - pero ya creceré tranquila que creceré - dije burlona como si la estubiese amenazando.

-Me viene de perlas- Contesté,sonriendo ampliamente.
- Pero...¿quién ha dicho que seamos amigas? - Pregunté con una ceja enarcada, bromeando. Al ver su expresión solté una carcajada y le revolví un poco el pelo.
- Pareces una barbie,tía. Rubia, blanca y ojos azules. Tendré que vigilarte muy de cerca si no quiero que los frikis que coleccionan barbies te lleven con ellos- La tomé por las mejillas y le moví la cabeza hacia ambos lados. Cuando recordé mi temperatura corporal la solté suavemente. - Lo siento- Me disculpé mientras ponía una cara graciosa.
- A veces se me olvida cuan caliente estoy...- Suspiré.

-Mi little sister...-canturreé. -Ah..¿pero que tú vas a seguir creciendo? Pensé que te quedarías en tu metro cincuenta y pico. - sonreí pícara, volviendo a bromear.

Me reí a carcajadas - hoy en dia no se coleecionan barbies - volvía reirme -[color:a2fe=color=orange] o es que tu eres una friki de esas¿? - le pregunté burlona.
Luego parecia una vijecilla estirandome de ls mejillas, tenia las manos calientes me reí cuando se disculpó - no pasa nada, mola que seas una especie de radiador - me reí.

Luego le miré mal ¬¬ - olle que mido uno sesenta y algo ehhhhh, señora dos metros - me reí.

- Yo no las colecciono ,pero te digo yo que hay locos por todas partes del mundo. ¿O es que tú no has visto a Smithers, el empleado del señor Burns? Ese colecciona barbies. - Bromeé, los simpsons,qué buena serie, tal vez una de las mejores que existían actualmente.

-sí,es guay, ya nunca tengo frío. Se acabaron las mantas y endredones, aunque estoy segura de que echaré de menos eso.

-Ya ya, señorita del metro sesenta y algo- Reí- Nop, aún no llego a los dos metros,y tampoco quiero llegar a ese extremo. Me conformo con no seguir creciendo hasta el metro noventa. - Aunque poco me faltaba, medía ya 1,82.

me reí a carcajadfas cuando dijo lo de smithers - muahahha! que buen ejemplo, pero deberias entenderlo ese... tiene algo de pluma - seguí carcajeandome.

- Pos no veo por qye debes de echar de menos eso ehhh - le dije algo incredula - bueno quizás sí - lo medité un poco.

- Ah bueno... te conformas - rodé los ojos divertida.

- olle sabes que? - dije refiriendo me a alguien - sabes de la lllegada de algun licántropo nuevo? -- le pregunté curiosa.

- ¿Pluma el chaval? Qué va,si se nota que está coladísimo por la madre de Milkhouse- Dije riéndome.
- Claro que sí, en realidad es divertido tener frío de vez en cuando- Me encogí de hombros.
- Sí,tampoco quiero crecer mucho,que luego duele la espalda.
-Que yo sepa no, ¿por qué? Hay algún licántropo nuevo?

Le miré curiosa , aunque la verdad no sabia si se estaba quedando conmigo - te duele la espalda por crecer? - pergunté con una ceja alzada.
Asentí cuando me preguntó lo de licántropo, al parecer Thomas aún no se habia relacionado con ellos - se llama Thomas - expliqué - sabes es muy majo - dije sonriente - pero el caso es que el no sabe que yo sé lo que és - me hice un lio yo sola. - me entiendes no? -me reí.

-Claro que duele, si llegas a crecer mucho, la espalda empieza a corvarse hacia delante y te quedas peor que el jorobado de Notre Dame y eso luego molesta. - Respondí,como si yo supiese mucho del tema XD
- Thooomas- Dije con voz melosa. - Sí sí,te entiendo.